Sintácticamente, las oraciones pueden dividirse, según los verbos que contengan, en dos grandes grupos:
- Oraciones simples: tienen un solo núcleo del predicado (Ayer vi a Juan).
- Oraciones complejas: tienen dos o más núcleos del predicado y, por tanto, dos o más proposiciones (Ayer vi a Juan y fui a la discoteca. Los núcleos son: vi, fui. Las proposiciones: Ayer vi a Juan, Fui a la discoteca).
A su vez, las oraciones complejas pueden clasificarse en tres clases (yuxtapuestas, coordinadas y subordinadas), de las cuales ahora vamos a estudiar las coordinadas.
Una oración compuesta coordinada es aquella que, además de tener dos o más predicados, reune las siguientes características:
- Tienen independencia sintáctica. Es decir, si en el siguiente ejemplo eliminamos una de las proposiciones coordinadas con el nexo, el resto de la frase tiene sentido: Dame mi dinero o lo lamentarás – Dame mi dinero.
- Están unidas por una conjunción (o locución conjuntiva) que cumple la función de nexo (y, pero, esto es, etc...)
Por todo ello, podemos clasificar las oraciones coordinadas en cuatro grupos:
- Copulativas: suman significados. Nexos: y (e), ni. Ejemplo: Vendré mañana y haré el trabajo.
- Adversativas: lo que se dice en una proposición se contradice en la otra. Nexos: pero, no obstante, sino que, sin embargo... Ejemplo: Llegué ayer pero no hice el trabajo.
- Disyuntivas: ofrecen una alternancia o una opción. Nexos: o (u), o bien... Ejemplo: Siéntate o vete.
- Explicativas: una proposición explica el significado de la otra. Nexos: es decir, o sea, esto es... Ejemplo: No he dormido nada, es decir, no he pegado ojo.
(Como actividad de ampliación, puedes realizar en tu casa los siguientes ejercicios interactivos sobre la oración coordinada: 1 2 )